Pero este 17 de noviembre es distinto a otros, ya que hace muy poco nos dejó nuestro actual conductor, Néstor Kirchner y nos generó pena y dolor… dolor que se convierte en compromiso militante.
En el ’72 el peronismo todo ... jóvenes, compañeras, y aquellos viejos queridos de siempre pintaron por todos lados “Luche y Vuelve”. Palabras muy fuertes y de mucho significado!!!
Hoy es un tiempo de militancia distinto, aunque tenga el mismo significado y lineamiento que tuvo allá por el ’72. Este significado que se transmitió de boca en boca, sirvió para mantener vigente el peronismo como lo hicimos hasta hoy.
El "Luche y Vuelve" se convirtió en “Luchá y transformá la realidad”.
¿Qué es ser militante hoy?
Es estar con la gente, con el que menos tiene, con el que necesita una mano. Es ser solidario con los compañeros, con los laburantes. Es trabajar con las Instituciones, escuchar lo que pasa en la calle. Es ayudar a nuestro intendente, a difundir las obras de gobierno, es ponerle el pecho a las adversidades. Es ayudar a que todos vivamos un poco mejor.
Por eso este tiempo de militancia, en su esencia, es la misma de aquellos años, pero distinto a la vez para aquellos que vivimos la realidad en un día a día. Perón nos legó un movimiento, para que el militante nunca se detenga. Y aunque en el camino hayan quedado muchísimos, la convicción y la fuerza puesta en cada acción, es la misma que hubo siempre.
No hay que asombrarse, no hay que descubrir nada que no estuviera ahí, sólo hay que sentirlo como el latido permanente que golpea el parche de los bombos.
El país es otro y ya nadie lo puede negar, aunque se obstinen en hacerlo. Por eso hoy es un día de militancia distinto. Porque cada militante hoy es distinto al que era, con mayor compromiso, con otros desafíos pero con las mismas ganas.
Al igual que ayer cuando Perón le dio el cuero para volver ese 17 de noviembre hace 38 años, hoy a nosotros nos tiene que dar el cuero para comprometernos con una idea, con un proyecto de transformación, con una forma de pensar la vida que a la larga significa trascender. Al fin y al cavo eso es la militancia. Luchar, volver y luchar y no detenerse jamás.
Hoy quiero pedir permiso para expresar un sentir que NO ES SABER. Quiero pedir permiso a los hombres y mujeres con historia dentro del peronismo, para ofrecer la voluntad de continuar el movimiento buscando el equilibrio de igualdad, entre los que tienen más y los que menos tienen, tantas veces mal expresado los de arriba y los de abajo, los verdaderos valores son los valores humanos, de la ética, la moral, la lealtad.
Hoy nos encontramos de cara a una gestión con sobrada muestra de acciones, en este joven que siente, sufre y respira peronismo. Un gobierno de obras, de inclusión, de cara a la gente. Con un compromiso firme en la educación, pensando en escuelas y Universidades.
Permiso, para encarnar al joven de las pintadas, al paisano del choripan, al vecino que arma una reunión, a la compañera que atiende una unidad básica, al compañero que con su experiencia nos aconseja y nos permite abrazar las banderas que Perón y Evita nos legaron.
Permiso, de corazón, con transparencia, con lealtad. Sin trampas, ni disfraces de lobo con piel de cordero, ni traidores. La falsa modestia es el último refinamiento de la vanidad y nuestra gente no necesita de falsas abogacías que militen para el bolsillo, sino de dirigentes con sensibilidad y sabiduría para plantear un escenario de progreso para todos.
Quiera Dios que la experiencia y la conducción de Juan y la estrategia y humildad de Juan Pablo se haga carne en cada uno de los responsables de construir más y más peronismo en